20.4 Conclusiones generales y recomendaciones de política
La acuapónica no sólo se encuentra en el nexo de las diferentes tecnologías, sino también en el nexo de los diferentes campos normativos y normativos. Aunque puede proporcionar soluciones a diversos objetivos de sostenibilidad, parece caer en las grietas entre las categorías jurídicas y políticas establecidas. Para aumentar la complejidad, el desarrollo de la acuapónica se ve afectado por la regulación de los diferentes niveles de gobierno. Por ejemplo, la facilitación de la agricultura urbana tiene que proceder a nivel nacional o incluso subnacional, ya que la UE no tiene competencia en materia de legislación de planificación. Probablemente podrían establecerse importantes incentivos reglamentarios para la aplicación de la tecnología acuapónica en la legislación sobre aguas, que corresponde a la competencia nacional y de la UE. La implementación de la acuapónica podría ganar una tracción significativa si las operaciones acuícolas tuvieran la obligación o al menos incentivos financieros para tratar las aguas residuales por sí mismas. Sin embargo, esto requeriría un cambio importante en el actual enfoque regulatorio.
En la teoría de los sistemas de innovación tecnológica (TIS), una «alineación institucional» en la fase formativa de un TIS se considera crítica. Sólo si las instituciones están suficientemente alineadas, los mercados formarán y proporcionarán espacio para la experimentación empresarial a fin de determinar vías comercialmente viables para la implementación de la tecnología (Bergek et al. 2008). Para que se lleve a cabo la alineación institucional, los defensores de la nueva tecnología deben estar suficientemente organizados para contribuir a un proceso de «legitimación» de su tecnología (Koenig et al. 2018).
Como primer paso, recomendamos que los defensores colaboren, creen y fortalezcan los vínculos con los diferentes actores y entre ellos en las comunidades profesionales pertinentes, con el fin de construir argumentos para hacer de la acuapónica una actividad legítima. La recién fundada Asociación Europea de Acuapónica podría desempeñar un papel importante en este proceso. Otra medida podría ser la elaboración de normas certificables en cooperación con los sistemas de certificación establecidos. Con la actual falta de un marco jurídico coherente, tales normas proporcionarían a los productores, consumidores, administradores y otras partes pertinentes (por ejemplo, inversores externos o aseguradores, que dudan de la seguridad de los productos acuapónicos) un marco para comprender la calidad y los riesgos. Dichas normas podrían adaptarse con flexibilidad a las exigencias prácticas de los productores. En última instancia, las reglamentaciones oficiales podrían basarse en esas normas, como lo hacen en otros ámbitos reglamentarios.
A nivel europeo, las partes interesadas deben presionar para que se reconozcan mejor los beneficios potenciales de la acuapónica en diferentes ámbitos políticos. La UE debe proporcionar un apoyo financiero fundamental, ya que la aplicación comercial de la acuapónica todavía está en sus inicios. La UE también debería proporcionar un foro para el intercambio de las mejores prácticas en materia de regulación, como la construcción y las aguas residuales, que son competencia de los Estados miembros.
A nivel nacional, las partes interesadas tienen que presionar por un marco regulatorio coherente y accesible que se adapte a las realidades de la acuicultura moderna y establezca incentivos para la «ecología creativa». Incluso podrían lograrse avances significativos a nivel subnacional, donde la resistencia política puede superarse más fácilmente. Las investigaciones adicionales deberían concentrarse en las estrategias reglamentarias de los diferentes países para determinar las mejores prácticas.